Este fin de semana he pasado un rato hojeando el libro que llegó el otro día a casa: Pan hecho en casa y con el sabor de siempre, de Xavier Barriga. Vale la pena deternerse unos minutos a leer pausadamente la introducción de la obra. La sonrisa y las palabras de Barriga animan verdaderamente a quien todavía no haya probado a hacer pan. Le invitan a 'ensuciarse' las manos, jugar con las harinas, experimentar con los ingredientes pero siendo fiel a los tiempos y las medidas, mimar la masa, disfrutar del aroma que impregna la cocina, escuchar el crujir del pan al enfriar y cortarlo con ilusión mientras se va pensando con qué se acompañará.
La obra conjuga los sólidos conocimientos y el entusiasmo de Barriga, la tradición de la panadería familiar y la innovación de la nueva etapa de Turris, que se materializan en sesenta creativas y apetitosas elaboraciones cuyas fotografías animan a ponerse el delantal. En la primera parte de la obra, de manera clara y práctica, se introduce al lector amateur en el universo panadero, presentándole los utensilios, los tipos de harinas y el resto de ingredientes habituales (agua, sal, levadura), la elaboración de una masa madre y, finalmente, el proceso de amasado de una masa base que luego utiliza en diversas recetas.
La segunda parte despliega esas sesenta recetas en quince bloques: panes clásicos, con fibra, aromáticos, dulces, crujientes, de otros mundos, caprichos que apetecen, hoy les voy a sorprender, los niños de la casa también hacen pan, panes de España, fogatines, pan para deportistas, pan para celíacos, otras necesidades dietéticas y finalmente clásicos de la bollería.
Muchas han sido las recetas que me han llamado la atención y me he animado a preparar dos: un pan blanco estilo ciabatta y unos fogatines.
El pan de tomate seco y orégano sigue la receta de pan ciabbata aunque he sustituido 100 gramos de trigo por su equivalente en kamut, lo que le aporta el tono tostado que se aprecia en la foto. No he preparado tampoco una barra ciabatta tradicional, me he decantado por un molde para 'pan de molde' porque me permite un levado uniforme con el que podré preparar buenas rebanadas para meriendas.
Ingredientes: 400 gr de harina de trigo, de fuerza, 100 gr de harina de kamut, 8 gr de sal, 300 ml de agua, 1 dado de levadura fresca, 2 tomates secos, 2 cucharadas de orégano seco.
Elaboración: mezclar los ingredientes por este orden, dejar reposar unos minutos, amasar unos 10 minutos, añadiendo al final los tomates secos y el orégano. Dejar levar un mínimo de 3 horas. De hecho Barriga recomienda reposo en la nevera durante 24 horas para aumentar el aroma de la fermentación, dejarlo a temperatura ambiente 30', darle forma y luego otros 45' de levado final. Para acabar, se debe pasar al horno,precalentado con vapor a 250º, donde estará unos 45' a 200º.
Por otra parte, he preparado una docena de panecillos fogatines, concretamente tres tipos. Los de la izquierda llevan cobertura de semillas de amapola, los del centro están aderezados con sésamo negro y los que aparecen al fondo van rellenos de aceitunas verdes y negras.
Ingredientes: 500 gr de harina de trigo de fuerza, 10 gr de sal, 280 ml de agua, 10 ml de leche, 30 gr de mantequilla, 1 dado de levadura fresca, ocho aceitunas verdes y otras ocho negras sin hueso, 2 cucharadas de sésamo negro, 2 cucharadas de semillas de amapola.
Elaboración: deben mezclarse, en primer lugar, el agua, la leche, el azúcar y la mantequilla. Añadir la harina con la sal y a continuación la levadura. Dividir la masa en cuatro partes, añadir a cada una los ingredientes elegidos (aceitunas verdes y negras, sésamo o amapola en mi caso), volver a amasar, aplanar con un rodillo para formar piezas de unos 2 cm de alto por 15 de largo. Yo he hecho las porciones a ojo y me han salido tres piezas de cada variedad, pero creo que usando las medidas que indica el libro pueden hacerse hasta 6 piezas.
Hornear unos 15 minutos a 230 grados, o hasta que cojan color. Opcionalmente, al sacarlos del horno puede pincelarse la superficie con aceite de oliva, en el caso de los salados, o con agua y añadir un poco de azúcar, en el caso de los dulces.
Aconsejo experimentar con otros ingredientes, según el gusto de cada cual. Algunas sugerencias: queso y cebolla, pimiento de piquillo cortadito, piñones tostados, sal maldon, frutos secos (almendras, avellanas, piñones, nueces, orejones, pasas, pistachos, higos secos), pesto u olivada. Incluso pueden hacerse panecillos dulces con pepitas de chocolate y piel de naranja confitada, mmmm... ¡Cuánto por experimentar!
domingo, 7 de noviembre de 2010
Xavier Barriga: entre la tradición y la innovación
Escrito por aprendizdepanadera
Etiquetas: blanco, libros, panadero, panecillos
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1 comentario:
Se ver riquisimos, los fogatines los tengo que hacer, ya he visto la receta en otros blogs y siempre me tienta...y los tuyos ummmm...besitos
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